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¿Qué es una Pérgola Bioclimática Cerrada?
El concepto de una pérgola bioclimática cerrada es tan sencillo como innovador: una estructura de jardín o terraza con lamas regulables y cerramientos que permiten ajustar las condiciones del espacio a tus necesidades. Se diferencia de otras pérgolas bioclimáticas en que se puede cerrar completamente, creando un espacio protegido de la lluvia, el viento y el sol. Pero esta sencilla definición esconde una enorme versatilidad y multitud de beneficios. Veámoslos más de cerca.
Ventajas de las Pérgolas Bioclimáticas Cerradas
Las pérgolas bioclimáticas cerradas ofrecen una serie de ventajas que podrían hacer que tu espacio exterior sea más cómodo y funcional. Vamos a explorar algunas de ellas.
Bienestar en cualquier mes del año
Con una pérgola bioclimática cerrada, puedes disfrutar de tu espacio exterior en cualquier época del año, sin importar las condiciones climáticas. Ya sea que esté lloviendo, haciendo sol o nevando, estas estructuras te proporcionan un espacio protegido y confortable.
Control sobre tu espacio
Las pérgolas bioclimáticas cerradas te dan un control total sobre tu espacio exterior. Puedes abrir y cerrar las lamas y los paneles laterales según tus necesidades, permitiendo más o menos luz y ventilación según lo desees.
Aumenta el valor de tu vivienda
Al igual que otras mejoras para el hogar de calidad, una pérgola bioclimática cerrada puede aumentar el valor de tu propiedad.
Tipos de Cerramientos para Pérgolas Bioclimáticas
Al hablar de pérgolas bioclimáticas cerradas, es esencial entender que existen diferentes tipos de cerramientos. Estos varían en material, mecanismo de apertura y nivel de protección que ofrecen. A continuación, analizaremos algunos de los más populares.
Cerramientos de Cristal
Los cerramientos de cristal son una opción popular para las pérgolas bioclimáticas cerradas debido a su estética y funcionalidad. Permiten una visibilidad completa, lo que significa que puedes disfrutar de las vistas de tu jardín sin interrupciones. Además, ofrecen una protección eficaz contra el viento y la lluvia.
Estos cerramientos suelen funcionar mediante un sistema de correderas, lo que permite abrir o cerrar las paredes de cristal según tus necesidades. Algunos modelos incluso tienen sistemas de bloqueo para asegurar los paneles de vidrio en su lugar durante condiciones climáticas adversas.
Cerramientos de Lamas
Los cerramientos de lamas son otra opción a considerar. Estos funcionan de manera similar a las lamas del techo de las pérgolas, permitiendo regular la cantidad de luz y ventilación que entra en la pérgola bioclimática cerrada.
La mayor ventaja de los cerramientos de lamas es que puedes ajustarlos para adaptarte a las condiciones climáticas y a tus preferencias personales. Por ejemplo, puedes cerrarlos completamente durante una tormenta o abrirlos parcialmente para permitir la entrada de una brisa ligera.
Cerramientos de Tela
Los cerramientos de tela, como las cortinas o estores, proporcionan una opción más flexible y decorativa para tu pérgola bioclimática cerrada. Aunque no ofrecen la misma protección que los cerramientos de cristal o lamas, pueden ser una excelente opción para proporcionar sombra y privacidad.
¿Cómo Funcionan las Pérgolas Bioclimáticas Cerradas?
Los cerramientos para las pérgolas bioclimáticas funcionan generalmente de dos maneras: manual o motorizado.
Cerramientos Manuales
Los cerramientos manuales requieren que abras y cierres los paneles o lamas tú mismo. Aunque esto puede requerir un poco más de esfuerzo, también ofrece un mayor control sobre la configuración de tu pérgola bioclimática cerrada.
Cerramientos Motorizados
Los cerramientos motorizados, por otro lado, funcionan con el toque de un botón. Algunos incluso vienen con sensores climáticos que ajustan automáticamente los cerramientos en función de las condiciones climáticas. Aunque pueden ser un poco más costosos, los cerramientos motorizados proporcionan la máxima comodidad y facilidad de uso.
¿Por qué elegir una Pérgola Bioclimática Cerrada para tu hogar?
Una pérgola bioclimática cerrada puede ser una excelente inversión para tu hogar. No sólo mejora tu espacio exterior, sino que también te proporciona un espacio cómodo y protegido para disfrutar durante todo el año. Con una variedad de cerramientos para elegir, puedes personalizar tu pérgola para que se adapte perfectamente a tus necesidades y estilo de vida.
Precio Pérgolas Bioclimáticas Cerradas
El precio de los cerramientos para pérgolas bioclimáticas varía en función del tipo, material, tamaño y si el sistema es manual o motorizado. Los cerramientos de cristal, debido a su alta calidad y estética, oscilan entre 200 y 400 euros por metro cuadrado, siendo los sistemas de corredera más costosos. Los cerramientos de lamas son una opción más asequible, con precios de 150 a 300 euros por metro cuadrado, y los sistemas motorizados son más costosos que los manuales. Por último, los cerramientos de tela son los más económicos, oscilando entre 50 y 150 euros por metro cuadrado, aunque ofrecen menor protección contra las inclemencias del tiempo.
¿Merece la pena invertir en una Pérgola Bioclimática Cerrada?
Mientras que los cerramientos para pérgolas bioclimáticas pueden parecer costosos inicialmente, es importante considerar el valor que aportan. Proporcionan una protección eficaz contra el viento, la lluvia y los rayos UV, lo que permite disfrutar del espacio exterior en cualquier condición climática. También ofrecen una mayor privacidad y pueden mejorar la estética de tu hogar.
Por lo tanto, si valoras la funcionalidad, la comodidad y el estilo, invertir en una pérgola bioclimática cerrada puede ser una decisión acertada.
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